Los inicios de Brownie do Rapha se remontan a la ciudad brasileña de Juiz de Fora, en unas circunstancias únicas. Cuando Raphael estaba acabando la carrera de educación física, se lesionó. Como no podía continuar sus estudios mientras estuviera lesionado, Raphael empezó a ver el canal de cocina durante su recuperación. Un día, Raphael vio la receta de un brownie en ese canal y decidió probarla. Él mismo cuenta que, después del décimo intento, los brownies salieron perfectos. Poco tiempo después, empezaron a pagarle por hacerlos.

Actualmente, Raphael tiene una tienda física con más de 20 empleados y una en Internet que realiza envíos a todo Brasil. Brownie do Rapha no es conocido solo por la receta básica de brownie con la que empezó, sino también por sus postres basados en brownies absolutamente deliciosos cubiertos con golosinas, glaseado y, en algunos casos, incluso paletas de helado. Gracias a estos postres tan desmesurados y visualmente impactantes, los clientes empezaron a compartir fotos de estos en Instagram.

Pero, además de crear un producto que los clientes comparten con frecuencia en Instagram, Raphael reconoce el mérito de la plataforma al ayudarle a hacer crecer su dulce empresa. "Nos ayudó a acercar la empresa a los clientes, a transmitir su esencia de una forma mucho más personal", afirma Raphael. Más concretamente, Raphael reconoce el importante papel que tuvieron los anuncios con video de Instagram a la hora de doblar los ingresos de la tienda en un solo año.